Redacción Delegalymas
Tras el tribunal concluir en que la defensa de la “Pastora”, Rossy Guzmán Sánchez no presentó nuevos elementos que justificaran la variación de la medida de coerción consistente en prisión preventiva, este lunes le fue ratificada la medida cautelar.
La Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional acogió la solicitud del Ministerio Público y ratificó la prisión preventiva a la religiosa, como medida de coerción por su implicación en el entramado de corrupción develado en el Caso Coral.
Los jueces Rafael Báez, Carmen Mancebo e Indira Montás concluyeron que la defensa de Guzmán no aportó elementos nuevos que induzcan al tribunal a variar la medida impuesta por la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente que conoció el auto sometido por el Ministerio Público en primera instancia.
Guzmán forma parte de los implicados en el expediente del entramado de corrupción del Caso Coral, que encabeza el mayor general Adan Cáceres Silvestre, exjefe del Cuerpo de Ayudantes Militares de la Presidencia (Cusep), y del que también son parte el coronel Rafael Núñez de Aza, el teniente coronel Raúl Alejandro Girón y el mayor de la Armada Alejandro José Montero Cruz. Además, el hijo de la religiosa, Tanner Flete Guzmán, a quien el pasado martes le fue ratificada la medida de coerción.
Sobre el caso, la procuradora adjunta Yeni Berenice Reynoso reveló el martes de la pasada semana, que en las investigaciones que ha desarrollado el Ministerio Público, luego de que les fuera impuesto un año y seis meses de prisión preventiva a varios de los implicados en el Caso Coral, se comprobó que los acusados habían comprado propiedades millonarias, que incluyen un yate, con fondos sustraídos del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani).
En torno a estos hallazgos, Reynoso informó que los fiscales a cargo descubrieron que el coronel Rafael Núñez de Aza también fungió como director financiero del Conani, a pesar de que no aparecía en los registros públicos.
La directora general de Persecución del Ministerio Público afirmó que las evidencias que a la fecha ha reunido el órgano de la persecución penal en contra de los implicados en el expediente del Caso Coral muestran que el monto de los bienes adquiridos es muy superior a los estimados al inicio de las investigaciones.
Indicó que esas nuevas posesiones y montos han sido incorporados al expediente y han arrojado mayor información con respecto a cómo operaba el entramado y a las maniobras fraudulentas de la compañía Único Real State, en la que tanto Tanner como la «Pastora», Rossy Guzmán, realizaban las operaciones.
Reynoso también se refirió a una empleada bancaria que, a cambio de prebendas, hacía operaciones financieras a favor del entramado y al margen de las reglamentaciones del sistema bancario.
Estas evidencias se unen a las antes especificadas, sobre los manejos fraudulentos en el Cusep y en el Cuerpo Especializado de Seguridad Turística.