Redacción Delegalymas
El Primer Tribunal Colegiado de La Vega condenó a 10, 20 y 30 años de privación de libertad a cuatro hombres que vestían de policías para cometer asaltos a mano armada en hechos ocurridos en 2013 en la carretera que conduce de La Vega a Jarabacoa, en donde resultó muerto un agente policial.
El Tribunal acogió las pruebas presentadas por la fiscalía, y condenó a los acusados Rafael Díaz Toribio (el Moreno) y a Yeuris Cerda (Jonathan), a 30 años de reclusión mayor, mientras que impuso 20 años a Alexis de Jesús Díaz, y 10 años a Rafael Díaz Veloz (padre de Díaz Toribio), implicados en los asaltos y en la muerte del agente Nelly Antonio Olivares Reyes.
Los jueces Lucrecia Rodríguez, Juana Patricia Silverio y Julissa Candelario, del citado tribunal, dictaron el fallo con base en los elementos probatorios que sustentaron la acusación del Ministerio Público.
Ordenaron que los condenados cumplan la prisión en los centros de corrección y rehabilitación Rafey Hombres, en Santiago, y La Isleta de Moca, provincia Espaillat.
En este caso también está involucrado como autor Rafael Rodríguez Aracena, quien fue declarado en rebeldía.
La fiscal titular de La Vega, Aura Luz García Martínez, destacó la fortaleza del expediente y dijo que las pruebas aportadas condujeron a esta condena por los hechos criminales cometidos.
El expediente acusatorio instrumentado por la Fiscalía de La Vega señala que el 15 de agosto de 2013, alrededor de las 8:30 de la mañana, los imputados simularon ser autoridades policiales y, usando armas largas y cortas, montaron un puesto de chequeo en la referida carretera, con la finalidad de realizar robos a las personas que transitaban por el lugar.
Señala, que luego de que el Ministerio Público y la Policía Nacional tuvieron conocimiento de la actividad delictiva, le dieron seguimiento al grupo y lograron el apresamiento de los hoy condenados, además de recuperar una camioneta y varios celulares, entre otros objetos robados.
Indica, que en el transcurso de las pesquisas, además fue ocupada una maleta (identificada por testigos) que contenía equipos completos de policía, como armas, chaleco antibalas, botas, insignia, gorras de policía del equipo SWAT, además de tres pistolas y una escopeta, dentro de las que se encontraba un arma sustraída a la víctima Olivares Reyes.
El Ministerio Público demostró que el grupo violó varios artículos del Código Penal Dominicano que sancionan la asociación de malhechores, heridas y golpes, robo con violencia, simulación de autoridad y usurpación de funciones, así como robo con armas, homicidio precedido de robo, además de la violación a la Ley 36, sobre Porte y Tenencia de Armas.