Redacción Delegalymas
La mañana de este miércoles el presidente Luis Abinader se trasladó hasta la Iglesia Nuestra Señora de la Consolación en la provincia San Cristóbal, para participar de la misa en memoria de las víctimas mortales, lesionados y desaparecidos por la explosión ocurrida este lunes en esa la ciudad del sur del país.
En la solemne ceremonia religiosa el mandatario estuvo acompañado de la vicepresidenta Raquel Peña, la primera dama Raquel Arbaje, y los ministros de la Presidencia, Joel Santos y Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza.
La celebración de la misa estuvo a cargo del sacerdote Cruz María Echeverría, párroco de la iglesia, quien resaltó las rápidas respuestas de las autoridades nacionales, provinciales y municipales ante siniestro.
El religioso también destacó el trabajo realizado por el personal de socorro y de los médicos, enfermeras y otros servidores del sector salud que estuvieron muy preocupadas por atender a las víctimas.
Reconoció igualmente la unidad y armonía de las autoridades y la población para que tras el acontecimiento, el sufrimiento fuera lo menor posible y que más rápidamente se respondiera a la emergencia.
Al elevar sus plegarias al Todopoderoso, el sacerdote podio por el eterno descanso de las personas que perdieron la vida por el siniestro y por la salud de aquellos que se recuperan de las lesiones sufridas.
Al final del culto religioso católico, el presidente Abinader se trasladó a la Gobernación de San Cristóbal para encabezar una mesa de trabajo en la cual se definieron las acciones tras la tragedia de San Cristóbal.