Redacción Delegalymas
Debido al motín del pasado lunes en el recinto penitenciario Anamuya en Higüey, en el que perdió la vida un privado de libertad y un grupo de internos mantuvo secuestrado por varias horas a un agente de vigilancia, la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC) informó este miércoles que inició una reestructuración en los mandos administrativos y de seguridad del mismo.
El titular de la DGSPC, Roberto Hernández Basilio, dijo que el recinto, el cual se mantiene en calma desde la tarde del lunes, fue intervenido de inmediato con la finalidad de detectar los puntos de conflicto y generar los cambios necesarios para mejorar las condiciones de habitabilidad y los servicios.
Indicó que la dirección provisional del recinto CCR14, está a cargo del subdirector de Tratamiento de la DGSPC, Noel Toribio. “Hemos iniciado una intervención integral del recinto con la finalidad de restablecer la normalidad. Lo primero ha sido cambiar la estructura directiva, incluido el personal de seguridad, sin interferir en las investigaciones que inició el Ministerio Público sobre los acontecimientos del pasado lunes”, dijo Hernández Basilio.
“Ahora estamos enfocados en la asistencia jurídica, de salud y actividades de tratamiento penitenciario que contribuyan a reducir los niveles de ansiedad en la población”, añadió.
El funcionario también especificó, que aunque este miércoles se produjeron quejas, debido a los retrasos que las nuevas medidas de seguridad provocaron en la distribución de los alimentos, la situación retomó la normalidad, con el restablecimiento de todos los servicios y atenciones.
Añadió que se sumaron cien colchones nuevos al recinto en el que los privados de libertad quemaron algunos durante el motín, y que en materia de salud se inició con la fumigación del recinto y las evaluaciones para determinar aquellos casos que por su gravedad o el tipo de quebranto requieran atención inmediata.
El motín del pasado lunes. Tras una requisa en la que el personal de seguridad incautó dos teléfonos celulares y conducía hacia los alojamientos de reflexión a los propietarios, un grupo de privados de libertad rodeó al agente VTP Carlos Mercedes Méndez y lo agredió con armas blancas.
Los internos además de retenerlo lo golpearon y lo llevaron a un lugar apartado, mientras los demás destruían candados, cámaras, televisores, lavamanos, inodoros y quemaron colchones, motivo por el que fue necesaria la intervención de los bomberos y la Policía Nacional, informó Hernández Basilio.