Redacción Delegalymas
El Tribunal Colegiado de la provincia La Altagracia, condenó a 20 años de prisión al profesor John Kelly Martínez, tras haberlo encontrado culpable de la muerte de la adolescente de 16 años de edad, Esmeralda Richiez Martínez, en Higüey.
Por el hecho criminal, ocurrido en la comunidad Vista Alegre, del distrito municipal La Otra Banda, de este el municipio, la Fiscalía de La Altagracia logró con las pruebas mostradas al tribunal, la reclusión mayor para el procesado, quien además deberá pagar una indemnización de dos millones de pesos, así como también una multa por 200 mil pesos.
Los fiscales Idalia Peralta y Yeuri Rodríguez, representantes del Ministerio Público, aportaron pruebas irrefutables, sobre cómo el profesor Kelly Martínez, quien tenía la responsabilidad como docente de proteger y orientar a la adolescente, faltó a ese compromiso, violando con sus acciones las disposiciones establecidas en el Código Penal Dominicano y la Ley 136-03.
Al docente se le imputa haber violado los artículos 265, 266, 302, 303, 303-4, 331 del Código Penal Dominicano, así como también el articulo 396 literales A, B, C, de la Ley 136-03 del Código para el Sistema de Protección de los Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes, y los artículos 66 y 67, de la Ley 631-16, para el Control y Regulación de Armas y Materiales Relacionados.
Caso Esmeralda Richiez Martínez. Los fiscales litigantes lograron establecer que el 12 de febrero del pasado año 2023, la adolescente salió desde el hogar donde residía con sus padres, en Vista Alegre, en compañía del maestro, así como del primo del hoy condenado, Rubiel Morillo Martínez y otras tres alumnas menores de edad.
Relata expediente, que al retornar a su hogar, alrededor de las 12:00 de la noche, la joven llegó pálida y sangrando, por lo que sus padres la ayudaron hasta llegar a su habitación donde esta quedó, pero, al día siguiente los padres de la adolescente la encontraron muerta en el baño de su residencia.
Según se demostró en la acusación contra Kelly Martínez, este, de forma voluntaria, le provocó a la víctima laceraciones, abrasiones y contusiones que le produjeron el deceso debido al desgarro vaginal, con hemorragia aguda severa externa e interna y shock hemorrágico como mecanismo terminal de muerte, de acuerdo al informe de autopsia-
El condenado, por disposición el tribunal, deberá cumplir la pena en el Centro de Corrección y Rehabilitación Anamuya, en Higüey.