Redacción Delegalymas
Por haber estafado a 283 personas de apellido Rosario exigiéndoles altas sumas de dinero para recuperar una supuesta herencia de 13 trillones de euros depositada en un banco en el extranjero por un pariente lejano apellido Rosario, la Segunda Sala Penal del Distrito Nacional condenó a cinco años de prisión al abogado Johnny Portorreal Reyes, cabecilla, y a dos años a Miguelina Santana, su socia.
Acogiendo la solicitud del Ministerio Público, la magistrada Clara Luz Almonte también condenó a Portorreal Reyes al pago de una multa de 50 salarios mínimos, mientras que descargó de la acusación a Miguel de Oleo Montero y Hilario Amparo de la Cruz, quienes también habían sido acusados por la institución judicial de formar parte de la red de estafa.
El Ministerio Publico logró demostrar ante el tribunal la culpabilidad de Portorreal Reyes y de Santana en la violación al artículo 405 del Código Penal Dominicano, que tipifica los delitos de asociación de malhechores y la estafa, así como de la Ley 631-16, para el Control y Regulación de Armas, Municiones y Materiales Relacionados.
Según se establece en el expediente instrumentado por la Fiscalía del Distrito Nacional, representada por los fiscales litigantes Laura Vargas y Rafael Reyes, el abogado Portorreal y Miguelina Gómez Santana se asociaron y, junto a otras personas, estafaron con RD$16 millones de pesos a las más de doscientas personas de apellido Rosario, a las que cobraron desde 15 mil hasta 24 mil pesos por persona, con la promesa de hacer las diligencias del supuesto cobro de la supuesta herencia millonaria.
Caso familias apellido Rosario. Se recuerda que el Ministerio Público presentó un expediente con más de 600 pruebas testimoniales y documentales que compromete la responsabilidad penal de Portorreal Reyes y sus asociados.
La imputación de la institución judicial establece que el grupo de procesados solicitaba altas sumas de dinero a las víctimas de apellido Rosario, alegando tener la información falsa de que el dinero de la supuesta herencia había sido transferido al Banco Central y posteriormente al Banco de Reservas, desde el Banco Santander, de España, y el Banco Zúrich, de Suiza.
Los investigadores presentaron evidencias con las que sustentaron la acusación, de que los encartados aseguraban a sus víctimas que los montos que requerían serían cobrados a través de la empresa “La Central del Derecho LPR, SRL”, dirigida por el abogado Johnny Portorreal Reyes, con la finalidad de realizar trámites para su registro como herederos de sus familiares antepasados fallecidos, señores Celedonio Rosario y María del Rosario.
Según consta en el expediente, el pago de los estafados por Portorreal y compartes, consistía en desembolsos que eran entregados a Gómez Santana y Portorreal, a quienes les cedían el derecho de un poder Cuota Litis, con el que se acordaba el pago de los honorarios, utilizado en una entidad bancaria al momento de retirar los fondos que iban a ser presuntamente depositados.
Mientras que Miguel D Òleo Montero e Hilario Amparo de la Cruz, descargados en el proceso, aparecen en el expediente como las personas que se encargaban de captar a los supuestos herederos de la familia Rosario, que reclamaban el dinero, a los que les ofrecían financiarles sus viajes o las diligencias en Europa, donde presuntamente estaban las sedes de los bancos internacionales donde aseguraban estaba supuestamente depositada la herencia.