Redacción Delegalymas
En la sesión de este martes, la Cámara de Diputados aprobó en única lectura un acuerdo suscrito el 30 de agosto de 1999, entre los gobiernos de las República Dominicana y de Colombia, sobre la autorización a los dependientes del personal diplomático para el ejercicio de las actividades remuneradas.
Dicho acuerdo tiene por objeto establecer el marco jurídico bajo el cual será dispuesta la autorización a los dependientes del personal diplomático, consular, administrativo y técnico a ejercer actividades remuneradas en los Estados signatarios sobre la base de reciprocidad.
Del mismo modo, los diputados también aprobaron una resolución mediante la cual se le solicita al presidente de la República la construcción, instalación y puesta en funcionamiento de un estudio de cine para la región suroeste con asiento en la provincia de Azua.
Esta iniciativa es de la autoría del diputado Luis Vargas, la que en uno de sus considerandos señala que la historia del teatro y del cine en la región suroeste, con énfasis en la provincia de Azua, se remonta a los finales del siglo XIX, con la aparición del teatro Las Delicias, en donde se presentó Brindis de salas, El Paganini Negro, la presentación de la obra de Renato Soto, y que así marcha la justicia, la primera y la única que ha sido escrita y escenificada con la compañía teatral Recal de Calvo, basada en argumentos sobre la primera intervención norteamericana.
Señala en otro considerando, que con el devenir del tiempo, se viene planteando la necesidad de la apertura de un moderno estudio de cine para toda la región suroeste (CINESUR) con asiento en la provincia de Azua, por ser el centro de dicha región que confluye con la amplia gama de atractivos turísticos, característicos de toda la zona, con locaciones únicas en el mundo.