Redacción Delegalymas
El ingeniero y político peruano-costarricense, Francisco Sagasti, de 76 años, asumió este martes la presidencia de Perú, tras la renuncia el lunes del congresista Manuel Merino, es el cuarto presidente en cuatro años en esta nación.
Sagasti tomó la presidencia del Perú en su condición de líder del Congreso desde el pasado 18 de marzo con el Partido Morado. Asume la misión de liderar el gobierno de transición hasta el 28 de julio de 2021, momento en que tomará el poder quien resulte ganador en las elecciones generales a celebrarse el próximo 11 de abril.
El político Sagasti, con fama de ser hombre de consensos, es el tercer mandatario que asume el gobierno peruano en una semana.
Su tarea más urgente es la de controlar la profunda crisis política que llevó a la renuncia de su predecesor, Manuel Merino, después de una ola de protestas en el país que dejó dos muertos y decenas de heridos, la cuales iniciaron tras la destitución en el Congreso del popular presidente Martín Vizcarra.
El nombramiento de Sagasti parece haber calmado la tensión pese a que continúa la desconfianza hacia los políticos del país.
Este lunes, cuando fue designado por el Congreso para la tarea presidencial, el primer acto de Sagasti fue salir del palacio legislativo y acercarse a decenas de personas que esperaban la decisión del Congreso. Los saludó con la mano en alto, gesto que fue aplaudido por los manifestantes.
Por la noche, cientos de personas marcharon de nuevo en Lima reclamando una nueva Constitución y “justicia para los caídos”.
“Actuaremos en el ámbito de seguridad ciudadana. Las primeras acciones serán para encontrar a los compatriotras que siguen desaparecidos”, dijo este martes Sagasti,
“Nos arrepentimos una vez más que haya cobrado la vida de Inti Sotelo y Bryan Pintado (…) El sacrificio de estos jóvenes debe marcar un hito”, dijo sobre los dos fallecidos en las protestas en un discurso con múltiples alusiones a la juventud, protagonista de las protestas.
Los dos jóvenes de la “generación Bicentenario” que murieron en las protestas en Perú aceleró la caída del presidente Manuel Merino. El nuevo presidente reafirmó que su primer desafío será que las elecciones de abril se celebren y que sean “absolutamente limpias”.
El sol, la moneda de Perú, reaccionaron positivamente al nombramiento de Sagasti y tuvo este martes su mayor subida en los últimos siete meses.
Otra de sus tareas será enfrentar la crisis de salud por el grave impacto de la pandemia de coronavirus en el país, dijo.
“Haremos lo posible por reducir los contagios de la covid-19 sin afectar seriamente la economía, sabemos lo difícil que resulta eso”, dijo en su discurso este martes en el Congreso.
Francisco Sagasti es “la persona ideal para liderar este Gobierno de Transición”, dijo hace dos días Julio Guzmán, fundador y líder del Partido Morado.
Francisco Sagasti. ¿Quién es? Tiene una maestría en Ciencias en Ingeniería Industrial por la Universidad Estatal de Pensilvania (Penn State, Estados Unidos) y tiene el grado de doctor en Filosofía desde 1972 por la Universidad de Pensilvania.
En Perú fundó y fue director ejecutivo del grupo de análisis GRADE; fue asesor de los ministros de Industria, Relaciones Exteriores, Educación y de la Presidencia del Consejo de Ministros en distintos gobiernos y también del Jefe del Instituto Nacional de Planificación.
Fue miembro del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología; y asesor de varias empresas privadas, instituciones públicas y organismos no gubernamentales.
Trabajó como profesor en la Universidad del Pacífico y en la Universidad Católica, además de desempeñarse como supervisor de proyectos en la empresa Niras Development Consulting en Suecia (2016-2018). También ha sido consultor de Naciones Unidas y fue alto ejecutivo del Banco Mundial.
En 1996, Sagasti fue secuestrado junto a otros 700 invitados por el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru durante la toma de la residencia del embajador de Japón.
Fue liberado a los pocos días y regresó a Costa Rica, lugar en el cual residía junto a su familia en aquel momento.
A su carrera en el sector privado y en la política, se le suman sus colaboraciones en distintos medios, la autoría de más de 25 libros y la realización de distintas series en televisión con las que ha querido presentar una radiografía de su país.
Ahora, apuntan algunos analistas, su papel fundamental en la presidencia interina debe ser de transición, con una agenda mínima y con la capacidad de enviar un mensaje de pacificación a la ciudadanía que se sigue manifestando.
Fuente BBC News Mundo.