Hannah Dugan, jueza del condado de Milwaukee, estado de Wisconsin, Estados Unidos, quien está acusada de ayudar a un inmigrante indocumentado a evadir a los agentes federales de inmigración, se declaró inocente “no culpable”, el jueves.
En el caso, el cual ha cobrado gran relevancia a nivel internacional, tras ser señalado públicamente por el presidente de EE.UU., Donald Trump, la magistrada fue acusada por un gran jurado de confrontar y mentir a los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), cuando intentaban arrestar al inmigrante mexicano Eduardo Flores Ruiz, en medio de la audiencia por un caso de violencia doméstica el pasado abril.
El hecho ha sido interpretado como un intento de la Administración Trump de enviar un mensaje claro de que no tolerará que funcionarios -en este caso, jueces- interfieran con la aplicación estricta de sus políticas migratorias.
La jueza ha sido también acusada en la corte del Distrito Este de Wisconsin de ordenar al indocumentado y a su abogado que salieran por una puerta trasera para evadir a los agentes de ICE. Por el caso, el arresto de la jueza el pasado 25 de abril, fue anunciado en redes por el propio director del FBI, Kash Patel. Sin embargo, la magistrada Dungan ha negado cualquier irregularidad, y su defensa busca la desestimación de los cargos, argumentando que su clienta tiene derecho a inmunidad judicial por sus actos oficiales.
El jurista Paul Clement, parte de su defensa, quien fue procurador general de EE.UU. durante la Presidencia de George W. Bush (2001-2009), ha criticado la acusación, calificándola de “inaudita e inconstitucional”.
No obstante, la cdel estado suspendió a la jueza Hannah Dugan la semana pasada, quien se enfrenta hasta seis años de cárcel, en caso de que sea hallada culpable de los delitos que se le atribuyen.
Fuente: EFE