Redacción Delegalymas
“En este Gobierno la vida humana es sagrada, y no voy a tolerar que de ninguna manera nadie esté por encima de la ley ni de que tampoco de que tampoco se puede usar a su antojo”, manifestó indignado y a la vez apesadumbrado el presidente Luis Abinader, ante la noticia de la muerte a tiros de una pareja de pastores evangélicos en Villa Altagracia, a manos de la Policía.
“No vamos a tolerar que la violencia nazca de las propias fuerzas que deben combatirla”, afirmó el primer mandatario.
Informó que dio instrucciones precisas al ministro de Interior y Policía, Jesús Vázquez para la cancelación inmediata de los agentes involucrados en este hecho.
Indicó asimismo, que instruyó para que se preste todo el apoyo y la ayuda necesaria a las familias de las víctimas con quienes se comunicó por teléfono y les expresó su pesar.
“En este país no cabe ya la impunidad, la arbitrariedad ni el abuso. Para nadie, ni con nadie», sentenció el presidente.
“No podemos deshacer el daño causado, pero si les puedo asegurar que se hará justicia”, advirtió el mandatario.
Estas declaraciones las pronunció el presidente Abinader durante una rueda en el Salón Las Cariátides del Palacio Nacional, en donde estuvo acompañado del ministro de Interior y Policía, Jesús Vázquez; el Consultor Jurídico del Poder Ejecutivo, Antoliano Peralta; el ministro Administrativo de la Presidencia, José Ignacio Paliza y la directora de Comunicaciones y Vocera de la Presidencia, Milagros Germán.
Abinader informó que ya se comunicó con algunos de los familiares de las víctimas. Dijo que quiso hablar con ellos porque solo en estos momentos “y con toda la fuerza de mi cargo puedo trasladar a estas familias la determinación de todo un Gobierno y todo un pueblo, de que no vamos a permitir un acto como este”.
“Esta triste noticia me reafirma aún más en mi compromiso irrenunciable de una reforma policial que sea integral, que se rija por protocolos éticos, y que la lleve a ser un cuerpo que cuide y proteja a todos los ciudadanos dominicanos”, manifestó.
Dijo Abinader, “no hay palabras, pero tampoco hay derecho para que un hecho como el ocurrido suceda. Una actuación policial desproporcionada y fuera de los márgenes de la ley daña la convivencia pacífica y erosiona la credibilidad de las instituciones. Quiero dejar claro también, que la dureza de mis palabras es un aviso a todos y a todas”.
Aseguró que toda la fuerza del estado estará “al servicio de la gente, de su gente, para garantizar sus derechos y nunca para arrebatárselos”.
Advirtió al pueblo dominicano que “desde aquí, y de la manera más solemne de la que soy capaz, les digo que no están solos. Que tienen con ustedes a todo el pueblo dominicano, y por supuesto, a su Presidente”.